Nuestro asociado el Alférez de Navío, r, D. Diego Quevedo Carmona, publica en la web “Lealtad al Rey”, un articulo en el que narra las aficiones musicales del Coronel de Intendencia de la Armada D. Narciso Cayetano y Ojeda, que allá por la primera década del siglo XX, llegó a componer un HIMNO A LA MARINA.
Acerca de un desconocido «Himno a la Marina»
En el mes de noviembre de 2017, con motivo de cumplirse los 300 años de la creación del Cuerpo de Intendencia de la Armada, la Revista General de Marina editó un suplemento monográfico dedicado a los miembros de ese Cuerpo que destacaron en otros aspectos fuera de lo que es el ámbito profesional dentro de la Armada, resumidos en diversos artículos.
En ninguno de ellos, se menciona a don Narciso Cayetano y Ojeda, un personaje nacido el 01 de noviembre de 1881, y que tras ingresar en la Armada el 01 de julio de 1897, llegaría a alcanzar el empleo de Coronel del mencionado Cuerpo de Intendencia. Hombre de letras, desarrolló casi toda su vida militar en Cádiz, colaborando intensamente y entre otras, a lo largo del primer cuarto del siglo XX con la revista gaditana IRIS, en la que solía escribir asiduamente numerosas rimas, con preferencia al soneto.
En aquella época de plenitud literaria de don Narciso, finales de los años 20 del siglo pasado, y dentro de sus numerosas inquietudes, se alió con don José del Río Maestre, un músico que hacía sus pinitos en hacer composiciones y arreglos musicales, llegando a hacer entre los dos un Himno a la Marina, que pronto quedó olvidado, entre otras razones por haberse finalizado coincidiendo con la marcha del Rey Alfonso XIII y a quien precisamente estaba dedicada, que acababa de marchar al exilio por la instauración de la II República. La partitura fue editada por la Casa Ildefonso Alier, que tenía sus sedes en la C/Infantas 19 y 21 (Madrid) y Barcelona, Plaza de Cataluña, 18.
Dado que es muy desconocida (no la quiero calificar de inédita), la presentamos hoy en sociedad, 90 años después de haber sido compuesta, por si alguien se atreviera a interpretarla,…
Fuente:
https://www.lealtadalrey.es/archivos/307