El coronel Ángel de Diez Jiménez, en el marco de CONFERENCIAS AEME 2022, impartió una conferencia sobre Logística de Futuro, avalada por el Teniente General García García de las Hijas Jefe del Mando Logístico del Ejército, que presentó al Ponente. Por su interés, para conocer el camino a seguir en la Logística, se reproduce este trabajo:
“LA LOGÍSTICA, PRESENTE Y FUTURO: EN VANGUARDIA DE LA TECNOLOGÍA E INNOVACIÓN”
EL CAMINO HACIA LA LOGÍSTICA 2035.
El escenario post-pandemia, unido a la situación de crisis de seguridad en Europa motivada por la guerra de Ucrania, está poniendo en valor el papel que la logística está jugando en el contexto geopolítico actual. En esta situación, España se puede convertir en un referente europeo en la introducción de los procesos derivados del concepto Industria 4.0 en sus procesos logísticos
El marco operativo y el escenario futuro para la batalla que se deriva de los análisis en curso, en el que se pone en valor la integración de los avances tecnológicos que permitirá las operaciones en red, la interoperabilidad con nuestros aliados y la capacidad para operar en un ambiente electromagnético degradado. Todo ello unido a la grave crisis demográfica por la que atraviesa nuestro país que resultará en una carencia de personal joven que se pueda incorporar a las FAS del futuro, lo que condicionará la forma de organizar la logística del futuro.
En los últimos años, en nuestro Ejército se ha evolucionado de una logística de servicios a una logística integral pasando por una logística de funciones. Desde 2008 la logística reactiva tradicional va dando paso a una logística predictiva, logística 2035.
El cambio viene motivado por la tracción que están ejerciendo los tres grandes proyectos en los que el ejército está ahora mismo envuelto el Ejército 2035: la Fuerza 2035, la Logística 2035 y el Talento Digital. A estos proyectos se suman las lecciones aprendidas resultantes de la participación del ET en la operación Balmis.
El proyecto Fuerza 2035 tiene por objetivo dotar a la Fuerza Terrestre, a través de los sistemas de armas más avanzados tecnológicamente, de las capacidades militares necesarias en el medio y largo plazo.
Dentro de este proceso se asignan al MALE nuevos cometidos, que no tienen cabida en los procesos tradicionales, como son: llevar a cabo la prospectiva de materiales, elevar propuesta de un Plan de I+D+i o apoyar en la elaboración del plan de experimentación. El desarrollo de capacitadores y tecnologías disruptivas, incrementará la eficiencia de las operaciones futuras.
Así, las mejoras en sensórica, inteligencia artificial, automatización y capacidad de procesado de datos, facilitarán las labores de inteligencia y la toma de decisiones. Se potenciará el empleo de sistemas autónomos y robots colaborativos que disminuyan la presencia del hombre en el campo de batalla. Los nuevos sistemas TIC garantizarán la hiperconectividad y la conciencia situacional. Los sistemas de armas tendrán mayores alcances y elevada letalidad. Se extenderá el uso de sistemas de armas no letales. Finalmente, los sistemas de energía, tanto para el almacenamiento como para la distribución, serán más eficientes y de menor consumo.
Por otro lado, la organización básica del Ejército de Tierra debe responder al concepto de «Organización Orientada a Misión», alineado con el modelo de gestión por procesos, base de la transformación digital del Ministerio de Defensa.
El primer paso ha sido elaborar el mapa de procesos de alto nivel del Ejército. El MALE ha identificado un proceso operativo único, que abarca todo el ciclo de vida del armamento y material, paralelo al proceso de obtención centralizada de la Dirección General de Armamento y Material (DGAM) y al que se ha llamado Sostenimiento de los materiales. Este proceso se articula en cuatro procesos asociados a las distintas fases del ciclo de vida.
Hasta 2018, año en el que se lanza el proyecto Fuerza 2035, la actividad del MALE se circunscribía a los procesos de análisis del sostenimiento, adquisición e integración del apoyo logístico. El proceso de crecimiento tecnológico es un nuevo proceso que estructura la mayoría de los nuevos cometidos asignados al MALE.
Los trabajos conducentes a la Logística 2035, comienzan mediante la implantación de la gestión por procesos antes referida. La última transformación de las estructuras del MALE, fue llevada a cabo en 2015 en el marco del Plan NOGAL (nueva organización del apoyo logístico), que supuso un avance notable hacia una organización matricial. La gestión por procesos exige profundizar en estos cambios estructurales y de mentalidad. Concluida esta fase, podrá completarse su digitalización.
Cabe destacar que el sector industrial está sufriendo actualmente una serie de cambios drásticos originados por la irrupción de nuevas tecnologías que, aplicadas a los procesos de producción, han dado lugar al concepto de “Industria 4.0”. La implantación de esas nuevas tecnologías en la industria va asociada al proceso de transformación digital, de la misma forma que se está realizando en el seno del Ejército de Tierra.
Finalmente, la Base Logística del Ejército de Tierra concentrará todos los recursos que actualmente tienen los órganos logísticos centrales, en busca de la excelencia en la gestión de los procesos logísticos, con el objetivo de maximizar la disponibilidad operativa de los materiales. Para ello, la Base integrará tecnologías habilitadoras de la Industria 4.0 que son clave para la modernización de las Fuerzas Armadas.
El talento digital es una dimensión del talento personal fundamental para el desarrollo de los conceptos antes explicados, derivado de la expansión de las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC), es la capacidad que posee una persona para desempeñar o ejercer actividades relacionadas con las tecnologías de información y de comunicación, dentro de un marco más amplio como es el proceso de Transformación Digital del ET.
EL MALE TIENE UN PLAN.
Para poder guiar a los actores del SALE en esta evolución hacia la Logística 2035, se ha elaborado un plan en el que establecen cuatro líneas de operación, asociadas a los grandes proyectos: la innovación de materiales, la transformación digital, la logística 4.0 y el proyecto tecnológico de la Base Logística.
Este plan permitirá el SALE actual evolucione a su versión 4.0 caracterizada por el desempeño de una gestión logística automatizada basada en la digitalización de sus procesos. En cualquier caso, el SALE seguirá proporcionando apoyo en permanencia, apoyo en zona de operaciones y apoyo en operaciones en territorio nacional.
Primera línea de operación.
Tiene por objetivo dotar a la Fuerza, a través de los sistemas de armas más avanzados tecnológicamente, de las capacidades militares que proporcionen a nuestras Fuerzas una ventaja operativa clara en el horizonte 2035.
Para la experimentación operativa del armamento y material, se ha creado la Brigada Experimental (BRIEX), tomando como unidad base la Brigada de la Legión. Al MALE se le asignan nuevos cometidos, que no tienen cabida en sus procesos tradicionales, como son: llevar a cabo la prospectiva de materiales, elevar propuesta de un Plan de I+D+i o apoyar en la elaboración del plan de experimentación.
Esta innovación de los materiales va a bascular alrededor del desarrollo del vehículo de combate de infantería sobre ruedas 8×8. Con el objetivo de racionalizar el coste del ciclo de vida, garantizar una operación segura, alcanzar la máxima disponibilidad operativa y generar conocimiento y capacidad técnica, se ha creado, en las instalaciones del Parque y Centro de Mantenimiento de Vehículos Rueda Nº 2 en Córdoba, la Oficina Técnica de Apoyo al Ciclo de Vida del 8×8. Se trata de un nuevo modelo de sostenimiento en el que se involucra a la empresa durante el ciclo de vida completo del sistema de armas.
La segunda línea de operación es la transformación digital.
No se trata únicamente de introducir la utilización de las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) en la forma de trabajar de los actores del SALE, cosa que ya se está realizando, sino de una evolución en el enfoque de la manera de trabajar en el MALE.
Para ello es necesario realizar un análisis de la manera de realizar los trabajos identificando cuando y como se hace, el modelado de procesos, como se guarda y se transmite esta información, gestión de la información y el conocimiento, y quien la realiza, descripción de los puestos de trabajo.
Es un cambio de mentalidad en la forma de trabajar, no solo en el MALE, sino en el ET, en el que la base de todo el proceso son las personas que componen la institución guiadas por las directrices que emanan del GE JEME.
La tercera línea de operación es la Logística 4.0.
La logística 2035 o Logística 4.0, que demanda el Ejército 2035, será una logística predictiva. La evolución de la logística reactiva actual a una logística predictiva modificará la manera de trabajar, de hacer las cosas, que será radicalmente distinta.
Paralelo al desarrollo de las tecnologías 4.0, las herramientas de logística predictiva evolucionarán al Sistema de Logística Predictiva del Ejército (SILPRE). El SILPRE es un modelo de sostenimiento 4.0 que permitirá maximizar la operatividad de los sistemas, aumentar la eficiencia de las operaciones logísticas, reducir la huella logística e integrar las actividades logísticas de mantenimiento, abastecimiento e ingeniería del ciclo de vida.
Se entiende que el mayor riesgo para la logística predictiva está asociado a la ciberseguridad en los procesos relacionados con el dato. En este sentido Centro de Sistemas de TIC (CESTIC), de la Secretaría de Estado de Defensa, forma parte desde el principio, del equipo de desarrollo tanto del SILPRE como de la Base Logística.
Proyecto Tecnológico de la Base Logística.
El Proyecto Tecnológico de la Base Logística, cuarta línea de operación, surge de la necesidad de optimizar las estructuras logísticas del Ejército en busca de la excelencia en la gestión de los procesos logístico. Recordemos que el objetivo prioritario de la logística es maximizar la disponibilidad operativa de los materiales, por lo que la Base no es solo un proyecto de infraestructura.
En la Base se concentrarán los recursos de los 12 órganos logísticos centrales que el Ejército tiene distribuidos por la geografía nacional. La Base dispondrá de dos ubicaciones: La Rinconada (Córdoba), sede principal y objeto del proyecto tecnológico, que concentrará la actividad de once de los 12 órganos logísticos; y por otro lado, las instalaciones del actual Parque y Centro de Mantenimiento de Helicópteros en la Base Coronel Maté en Colmenar Viejo, en la que desarrollará su actividad el Centro de Mantenimiento de Sistemas Aeronáuticos.
Se trata de un proyecto de oportunidad, ya que concentra centros e integra tecnologías 4.0. Está llamado a ser un centro de referencia, el “Hub” logístico, para el sur de Europa.
CONCLUSIONES.
El entorno operativo de actuación del Ejército 2035 hay que concebirlo como fuente de grandes oportunidades para el ET, más que una fuente de amenazas. Con la adecuada evolución, será posible dedicar la inteligencia humana a las actividades donde es necesaria esa capacidad de análisis y raciocinio que posee el ser humano, automatizando otras tareas de bajo nivel intelectual y carácter repetitivo.
Para ello es necesario disponer de una financiación estable a medio plazo, dado los tiempos de desarrollo e implementación de muchas de las tecnologías consideradas para la Logística 4.0.
Finalmente recalcar que la base de esta transformación es la persona. Solo con soldados convencidos de la importancia de su misión, conocedores de una situación final de la logística definida con claridad y con un adecuado talento digital será posible evolucionar el modelo actual hacia la Logística 2035.
Coronel Angel de Diez Jiménez
Mando de Apoyo Logístico al Ejército de Tierra