La Cátedra de Estudios Internacionales , del Instituto Europeo de Estudios Internacionales, que dirige nuestro Presidente el General de División, r D. Jesús Argumosa Pila, ha publicado este documento que puede ser de interés para la próxima Jornada a celebrar ADALEDE-AEME
El Futuro de la OTAN y la Bipolaridad Dual
Los ministros de defensa de la OTAN se reunieron en Bruselas el miércoles, 26 de junio de 2019, para abordar la violación por parte de Rusia del Tratado de las Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF) y la respuesta de la Alianza. “Seguimos instando a Rusia a volver a un cumplimiento total y verificable”, dijo el Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg. Subrayó que Rusia continúa produciendo y desplegando misiles SSC-8, y por lo tanto la OTAN se está preparando para un mundo sin el Tratado INF. “Los ministros han acordado hoy que la OTAN responderá en caso de que Rusia no vuelva a cumplir”, dijo el Secretario General. Destacó que Rusia todavía tiene la oportunidad de salvar el Tratado INF y los Aliados transmitirán este mensaje en una reunión del Consejo OTAN-Rusia la próxima semana1. 1.- Introducción El pasado 4 de abril, la OTAN celebró en Washington sus 70 años, esta vez con 29 miembros en lugar de los 12 miembros iniciales de 1949 y solo a nivel de ministros de Exteriores. Ha sido en el mismo escenario y ante la misma amenaza, Rusia, que reaparece, pero ante una situación geopolítica internacional totalmente distinta de la que existía entonces cuando China apenas era un país agotado que acababa de salir de una larga guerra civil. Hoy es una gran potencia. El actual panorama internacional de seguridad está haciendo frente a cuatro grandes dilemas geopolíticos que nos van a afectar poderosamente en los próximos años. El primero se centra, a nivel global, en saber quién será el actor o los actores que señalarán las reglas de juego del nuevo orden mundial ¿Serán los EEUU – con o sin la UE – o será la asociación chino-rusa? El segundo gran dilema geopolítico está relacionado con conocer cuál será la solución al enfrentamiento entre la Unión Europea y Rusia en el Este de Europa, particularmente en referencia a Ucrania y a la península de Crimea.
El tercero se halla en averiguar ¿cómo se resolverá el laberinto de la conflictividad de Oriente Medio donde existen tres tipos de enfrentamientos: a) por un lado, Rusia y Estados Unidos; b) por otro, Estados Unidos e Irán; y c) en tercer lugar, el de las potencias regionales entre sí ? El último gran dilema geopolítico lo encontramos en Asia, ¿qué pasará con la agresividad territorial de China en el Mar de China Oriental y en el Mar de China Meridional frente a la oposición de EEUU y la reclamación de dichos territorios por otros países de la zona entre los que se encuentra Japón? En este ambiente de inestabilidad mundial deberá moverse la Alianza durante la primera mitad del siglo XXI. No cabe duda de que el gran dilema geopolítico que afecta más directamente a la OTAN en el nivel regional lo conforma el conflicto entre la UE y Rusia en el teatro de Europa del Este ya señalado, aparte de otras acciones agresivas rusas en el Estrecho de Kerch contra personal y barcos ucranianos. Pero también le preocupa el resto de los grandes dilemas, particularmente en el que interviene China. 2.- Pasado reciente Hablar del futuro de la OTAN sin disponer de una mágica bola de cristal no es un tema menor. Constituye una Alianza longeva y exitosa que ha estado en constante evolución desde sus comienzos, en 1949, y ha superado varias crisis desde la de Suez de 1956 hasta la de la guerra de Irak, en 2005, pasando por la del abandono de Francia del mando militar integrado, en 1966, o por las desavenencias en el proceso de negociación del Tratado INF antes de su firma en 1987. No cabe duda de que la anexión ilegal de Crimea por parte de Rusia en la primavera de 2014 junto con el apoyo político y militar ruso a los separatistas ucranianos, ha supuesto un verdadero punto de inflexión para la estabilidad europea y atlántica. La actuación de los pequeños hombres verdes en Crimea dentro de un nuevo tipo de morfología del conflicto al que se ha denominado guerra híbrida ha roto los supuestos en que se sustentaba hasta entonces la liturgia de la guerra. A partir de dicha fecha la OTAN ha emprendido el mayor refuerzo de su defensa colectiva, su misión más importante, en una generación. En base a su Iniciativa de Presencia Avanzada, por un lado, se han desplegado en Europa Oriental cuatro grupos de combate en Estonia, Letonia, Lituania y Polonia que están liderados por el Reino Unido, Canadá, Alemania y Estados Unidos, respectivamente. Supone un monto de más de 4.500 militares de toda la Alianza. A mayor abundamiento, se ha establecido en Elblag, Polonia, el Cuartel General de la División Multinacional Noreste capaz de proporcionar apoyo de mando y control a nivel divisionario en caso de crisis.
Por otro, en el marco de dicha Iniciativa la Alianza ha estado desarrollando un conjunto de actividades en la región del Mar Negro donde destacan la creación de una Brigada Multinacional para preparación y entrenamiento de fuerzas terrestres aliadas, desplegada en Rumania, junto con un aumento en la realización de ejercicios navales y aéreos en dicha región. Asimismo, las Fuerzas Navales Permanente de la OTAN están incrementando su presencia en el Mar Negro a los efectos de mejorar la instrucción de combate y la interoperabilidad necesaria con las fuerzas navales de los países aliados de la región, es decir, con Bulgaria, Rumania y Turquía y con las fuerzas de los países socios de la zona. A modo de ejemplo, en el año 2018, los barcos de la OTAN han pasado 120 días en aguas del Mar Negro por encima de los 80 días que pasaron en el año 2017. La Iniciativa de Presencia Avanzada de la OTAN se sustenta en una robusta estrategia de refuerzo rápido para asegurar que en un escenario de defensa colectiva las Unidades ya desplegadas señaladas puedan ser respaldadas y apoyadas por la Fuerza de Respuesta de la OTAN (NRF en sus siglas en inglés) integrada por 40.000 efectivos. Dicha NRF incluye una Brigada Multinacional de muy alta disponibilidad (VJTF en sus siglas en inglés) como punta de lanza, liderada en 2018 por Italia, en 2017 por el Reino Unido y en 2016 por España. La Alianza se está adaptando y respondiendo con éxito al entorno de seguridad más complejo e impredecible desde el final de la guerra fría ante una serie de desafíos y amenazas de actores estatales y no estatales incluidos ataques terroristas, cibernéticos e híbridos. En la Cumbre de Bruselas de la OTAN, de julio de 20182, los lideres aliados tomaron más de un centenar de decisiones para fortalecer la Alianza, acogieron con satisfacción el considerable progreso hecho desde 2014 para mejorar la capacidad de la Alianza para responder a cualquier amenaza, ya sea convencional o ya sea no convencional. También los aliados reconocieron que un entorno de seguridad más incierto requiere que todos los aliados sigan invirtiendo más en defensa, desarrollar las capacidades adecuadas y hacer las necesarias contribuciones a las operaciones y misiones de la OTAN. Asimismo, en dicha Cumbre se tomó la decisión de intensificar el papel de la OTAN en la lucha contra el terrorismo. Se acordó, por una parte, lanzar una nueva misión de entrenamiento en Irak con la participación de cientos de instructores de los países de la Alianza y, por otra, establecer escuelas militares para aumentar la profesionalidad de las fuerzas iraquíes. Además, se decidió que se prestara un mayor apoyo a los socios clave en Oriente Medio y en el Norte de África, incluidos Jordania y Túnez.
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