El 29 de enero D. Jose Maria Farfán Álvarez-Campana, publico en Linkedin este interesante entrada:
Por qué contar con un militar retirado supone un gran activo para tu empresa.
No lo voy a negar, mi predilección por el ámbito militar viene desde el inicio de mis días. Como hijo y nieto de militar, he tenido la suerte de poder crecer rodeado de los valores que ello implica, y es por eso que lo aprecio y respeto de forma infinita.
Recuerdo un día, con 16 años, cuando me regalaron un libro, “El arte de la guerra” rezaba, escrito por un tal Sun Tzu. Yo, de aquellas era un joven adolescente que nunca había imaginado todas las implicaciones que podía haber detrás de un enfrentamiento, es por ello, que me quedé absorto al leer cómo Sun Tzu planteaba el concepto de la estrategia y el uso de la inteligencia en el combate. Definitivamente, ese libro cambió mi forma de ver las cosas. Años después, mi afición por la lectura, concretamente en temática de desarrollo personal, me llevó a encontrarme de nuevo con este título y no, no tenía nada que ver con conflictos bélicos, sino que era con aplicación… ¡En el mundo de la empresa!
Pero… ¿Qué tiene que ver todo esto con el título?, ¿Qué hace un militar retirado en una empresa civil?
Pues bien, Sun Tzu fue un general chino a las órdenes del rey Helü hace unos 2500 años. Si por algo destacó esta figura histórica y autor de “El arte de la guerra”, fue por su habilidad para derrotar a ejércitos más numerosos y mejor aprovisionados que el suyo, simplemente valiéndose de un elemento fundamental, la estrategia.
Y es eso lo que precisamente puede un militar puede aportar a su empresa, visión estratégica, factor sin duda clave en el mundo empresarial y que marca la diferencia entre las empresas que las que crecen y las que no. Pero no solo eso, me atrevería a decir que empapan a las organizaciones con sus valores de honradez, tenacidad y disciplina, valores interiorizados a lo largo de muchos años de servicio desinteresado a su patria y a sus compatriotas.
Esto no es algo nuevo, el mundo de la empresa lleva años beneficiándose de los conocimientos adquiridos del mundo militar. Encontramos numerosos ejemplos en objetos cotidianos que surgieron en el seno del mismo, como el gps o el microondas; o también, por ejemplo, la logística tal y como la conocemos hoy. ¿Por qué no hacerlo más frecuentemente y con un activo más valioso? Sí, me refiero a las personas.
Son muchos los militares retirados que conozco y que ponen día tras día sus conocimientos y habilidades a disposición de la mejora de la sociedad a través de la empresas. Entre ellos, y hasta hace pocos años, mi abuelo.
Ellos, son la voz de la cordura y la mente fría cuando las situaciones se vuelven adversas; ellos, cuentan con el liderazgo para poder conducir a una empresa a la gloria; ellos, no solo han aportado mucho a su país sino que aún tiene mucho que decir.
Si quieres que tu empresa destaque, sin duda, pon un militar en ella.