“De la trinchera a la calle” (Inventos militares que nos cambiaron la vida).

Este interesante libro , cuyo autor es Isabel Uriarte Arbaiza,  prologado por el Teniente General Agustín Muñoz Grandes, lo dedica la autora a su padre, general de Brigada, matemático, músico, inventor, etc.

El general Dávila, le dedica el siguiente comentario en su Blog:

Isabel Uriarte Arbaiza acaba de publicar un libro. No es el primero, pero siempre que uno edita requiere una especial atención hasta que alcanza la mayoría de edad. Yo se la dedico como si fuese familiar porque además lo es, familia militar que todos somos. De la trinchera a la calle. Inventos militares que nos cambiaron la vida es su título, sugestivo y curioso que nos introduce en un mundo casi desconocido por todos.

Dedica el libro a su padre, general de Brigada, matemático, músico, inventor, en fin, casi como todos los soldados, porque en la vida militar el invento, a diario, es una necesidad. Además un soldado se mueve siempre entre la música y la matemática de la vida donde no todo se resuelve con una ecuación.

¡Siempre está usted inventando! Me decía mi capitán; y yo pensaba para mis adentros: como no invente y supla con celo todo lo que nos hace falta de esta no salimos.

Mis palabras no pretenden hacer una reseña del libro ni tan siquiera promocionar una obra que lo hace sola y sin más ayuda que su valor. Solo pretendo dar las gracias a Isabel Uriarte por su  gentileza al hacerme entrega del libro con preciosa dedicatoria y mucho cariño. Ella se siente paracaidista, pero es más que eso, con todo lo que es ser paracaidista, ella tiene alma de soldado. Y se nota cuando escribe, cuando habla, cuando piensa y siente. ¡Gracias Isabel!

Este es el continente. El contenido es ¡Dios mío, cuántas cosas que no sabemos! Me sorprende saber y no saber, me sorprende lo que se puede llegar a hacer, de la necesidad virtud, y después de la lectura del libro de Isabel recuerdo aquella frase de Borges: <<No me enorgullezco de lo que he escrito, sino de lo que he leído>>.

Desde la Sanidad, alimentación, la moda, el deporte, la papelería…, todo, en todo está la huella militar, y todo lo recoge este libro. Termina con unos <<dimes y diretes militares>> que son el postre perfecto para tan suculento menú. Como tengo delante uno de esos dimes: <<Al buen callar llaman Sancho>>, pues eso, que me callo, no sin antes destacar el prólogo justo y medido del general Muñoz Grandes.

Un gran acierto y mejor encuentro con este magnífico libro.

Gracias Isabel.

General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

 

 

 

 

Dedica el libro a su padre, general de Brigada, matemático, músico, inventor, en fin, casi como todos los soldados, porque en la vida militar el invento, a diario, es una necesidad